En esta ocasión volvemos ha realizar una salida conjunta con los compañeros de la SIRE de la UEC del Prat, Tony y Bernardo. Estos tenían permiso del Ayuntamiento de Benifallet para poder visitar la Cueva Marigot, la Cueva Meravelles y la Cueva del Dos, estas dos últimas acondicionadas para la visita turística., y que recomendamos para toda aquella persona que se encuentre por la zona.
Quedamos en el pueblo de Benifallet, nosotros (Guillermo, Raúl y Javier) llegamos en dos horas y media directamente desde Zaragoza y ellos desde Barcelona. Después del pertinente café e intercambio de saludos y noticias en un bar del pueblo, nos dirigimos directamente hacia el aparcamiento habilitado para las cuevas turísticas.
Nos cambiamos y nos dirigimos primero a ver la Cueva Marigot que era nuestro principal objetivo, el acceso es inmejorable, ya que esta a dos minutos del coche por un camino perfectamente acondicionado.
Esta cavidad, al igual que las otras dos, esta cerrada con llave y es necesario pedir permiso al Ayuntamiento para su acceso.
Desde la entrada a la cavidad nos dimos cuenta que alguno de nosotros lo ivamos a pasar mal, ya que nada más entrar la cueva ya te obliga a reptar y a pasar por pasos angostos, esta tónica predomina hasta una sala a la que se accede desde su parte superior por una rampa sin mayor dificultad, de esta parten varias posibles vías a las que no encontramos continuación posible, salvo un pequeño agujero muy cerca de la rampa de acceso que nos da paso a un nivel inferior de la cueva donde se llega a una pequeña sala.
Desde la sala parten dos vías, una diaclasa que se reduce poco a poco hasta obligarte a reptar por una caliza muy abrasiva y una galería relativamente cómoda que da acceso a la parte mas bella de la cavidad. Desde aquí se puede seguir por una estrecha galería en donde se han forzado varios pasos y donde encontramos pequeños pero bellos rincones.
Después de tanto roce y enganchón se nos permitió visitar esta cueva. Como ya hemos indicado esta totalmente preparada para una visita turística. Es de relativo corto recorrido, pero todo ella plagada de variados espeleotemas.
Por último entramos en esta cueva que esta parcialmente preparada para la visita turística. Como las anteriores es una cavidad totalmente fósil en la que abundan las coladas y las columnas. Hicimos una revisión exhaustiva intentando encontrar una conexión con la Cueva Marigot, ya que en una topo que vimos la hacia factible, pero todos nuestros intentos fueron en vano.
Queremos destacar y agradecer el trato y la dedicación recibida de Hassan, encargado del mantenimiento de las instalaciones turísticas y del exterior del recinto, incluido el bar donde pasamos un agradable momento. A las siete de la tarde emprendíamos cada uno viaje hacia nuestras poblaciones de origen acompañados de un diluvio que a nosotros no nos abandono hasta Zaragoza.
Fotografías de:
Raúl García
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